jueves, 18 de noviembre de 2010

Camisón camisón, parte II

Buenos días a mis gordis lectoras, y a las que no lo estén, también!!!

Ayer terminé definitivamente con la guerra del camisón con abrefácil. Fui a Mothercare, que ya podia habérseme ocurrido ir antes, por cierto, y compré dos camisones de lactancia por unos 3o y pico euros. Talla 44 adaptada, es decir, muy amplios en la barriga, y con corchetes en el pecho que dan mas que de sobra (creo) para sacarse la tetilla.

También tienen sujetadores de lactancia bonitos (ooooooh) y pijamas de lactancia con abrefácil bonitos y cómodos. No es que sea barato, pero práctico y cómodo si. Doy fe de unos pantalones premamá de vestir que me compré alli y que me costaron 40 y pico euros muy bien pagados, porque son mil veces más cómodos que los vaqueros de C&A que tuve que recoser para bajar la cintura. Al final acabo lavando y poniendo y lavando y poniendo y lavando y poniendo los pantalones de Mothercare, y entre lavada y secada me tengo que jorobar y ponerme los vaqueros, que no están mál, pero son más incomodos.


Asi que ya tengo casi todas las compras listas para preparar la maletilla. Solo me queda comprar un sujetador de lactancia, las compresas tamaño abuela para los días de postparto, y unas bragas de prenatal de gasa, desechables pero lavables un par de veces, que tienen pinta de aguantar bien las compresas, de ser cómodas, y parece que deben molestar poco en caso de acabar en cesárea. Y son tan grandes que seguro que por el culete no se meten!!!

El resto de bragas desechables que he visto me parecen además de incomodisimas, poco eficaces en su funcion de aguantar una de esas compresas gigantes. Habeis visto que pintas? Divina de la muerte, vaya!

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